¿Formación básica?

Todo ser humano tiene como derecho, recibir una educación digna la cual le permita desenvolverse en el mundo que le rodea y en el cual le ha tocado vivir, haciendo frente a lo que ello acarrea.
Dentro de ese derecho que es la educación, se debe otorgar, como mínimo, una formación básica, refiriéndose a ella como los conocimientos en base a la lectura y escritura, y los relativos a las matemáticas. Es un aprendizaje que permite a la persona avanzar a pequeños pasos, pero lo suficiente para comprender lo que ocurre a su alrededor, ya sea con mínimas lecciones.
Pero el mundo avanza, y con él, el conocimiento y la sociedad. Es preciso la adquisición de competencias no sólo en el lenguaje y en los números como ya se ha mencionado, sino que se exige uno mismo, tener información sobre las nuevas tecnologías y los idiomas, para no quedarse como un “objeto de adorno” en el mundo, sino ser uno más que se abre camino en el mundo del conocimientos y poder.

Este proceso de alfabetización, no debe terminar con adquirir conocimientos que son reflejados por libros o máquinas, sino que debe ir acompañado por una serie de destrezas, habilidades y valores que la persona debe incorporar en el proceso de aprendizaje junto a la formación que va recibiendo, con el fin de que esta “formación básica” cree sólidas bases para posteriormente asentar una enseñanza mayor, actualizándose a lo largo de la vida y enriqueciéndose mediante la experiencia y la interacción.